Las muelas del juicio son los terceros molares y son fuente de problemas en la mayoría de personas en las que erupcionan. Desgraciadamente tienen un papel importante en la patología odontológica, por la elevada frecuencia de su inclusión y por el dolor que suelen provocar en los pacientes que sufren erupciones incorrectas. La muela del juicio es el diente que con más frecuencia se halla incluido y suele provocar dolor u otros problemas. Lo más común es que su aparición afecte a otros dientes, ya sea empujándolos en el momento de su erupción hacia la parte delantera del maxilar o saliendo torcidas. Por lo que en la mayoría de los casos el tratamiento dental recomendado es su extracción.
Extracción de los terceros molares
La muela del juicio es el último diente en erupcionar. Suele aparecer a partir de los 17 años de edad, ya que antes la mandíbula no se ha desarrollado completamente para permitir su erupción. Sin embargo, unas veces quedan incluidas (no nacen) y otras veces los terceros molares emergen, aunque la persona no tenga espacio suficiente en la boca, lo que hace que no crezcan alineadas y deban ser extraídas.
Como son los últimos en erupcionar, con frecuencia, la boca no tiene suficiente espacio libre para acomodarlos. Cuando eso ocurre, los dientes quedan retenidos (atrapados por otros dientes o por el mismo hueso, debajo del tejido gingival). Si los dientes quedan retenidos, con el tiempo provoca caries dental e infección en la muela impactada produciendo dolor e hinchazón en la zona.
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